Cristianos alrededor del mundo ahora mismo están siendo severamente perseguidos y martirizados. Muchos de ellos creen que el mundo ya está en la tribulación. No obstante, debemos tener cuidado de distinguir la tribulación de nuestras pruebas diarias, angustia, sufrimiento, y aun martirio individual, de la tribulación que empieza en la tierra después de que los creyentes hayan sido arrebatados. Pablo les dijo a los corintios: “Sobreabundo de gozo en todas nuestras tribulaciones” (2 Corintios 7:4). La Biblia Nueva Versión Internacional nota que Pablo no se está refiriendo a la tribulación de los últimos tiempos, aunque la palabra griega es la misma. El versículo se traduce así: “En medio de todas nuestras aflicciones se desborda mi alegría.” Podemos distinguir las dos tribulaciones al usar letra mayúscula para la Tribulación de los últimos tiempos. No hay similitud total entre las dos. Cuando la tierra sea consumida por los juicios de la Gran Tribulación, todo lo que hayamos enfrentado antes de ese tiempo parecerá insignificante, principalmente debido a la magnitud mundial de la ira y la furia de la Tribulación.
Algunos expositores usan la palabra Tribulación para la semana septuagésima de Daniel, y las palabras Gran Tribulación para la última mitad de los siete años. Sin embargo, no hay un apoyo bíblico para tal distinción. Por lo tanto, este estudio usará ambos términos, con uso de la mayúscula, para referirse al periodo completo de los siete años.
Hay otras interpretaciones sobre cuándo ocurrirá el arrebatamiento. Cada una de ellas carece de la verdad bíblica contenida en la posición del arrebatamiento pre-tribulación. Es importante entender el defecto de cada uno de los siguientes puntos de vista.
El arrebatamiento meso-tribulación. Esta creencia enseña que el arrebatamiento de la iglesia ocurrirá a la mitad de la Tribulación, coincidiendo con la anulación del pacto del anticristo con los judíos (Daniel 9:27). Poner el arrebatamiento en este tiempo, después de la confirmación del pacto al principio de la semana septuagésima de Daniel, contradiría la advertencia de que “el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis” (Mateo 24:44).
El arrebatamiento post-tribulación. Esta creencia enseña que los cristianos pasarán por toda la Tribulación. El arrebatamiento y el regreso de Cristo a la tierra para destruir al anticristo son vistos como un mismo evento. Este punto de vista del arrebatamiento viola la promesa de Dios de que los creyentes no están puestos “para [sufrir la] ira” (1 Tesalonicenses 5:9).
Estos puntos de vista tienen también un número de variaciones menores, y probablemente habrá más a medida que Jesús demora su venida. Esto incluye la teoría de un arrebatamiento parcial, arrebatamientos múltiples en diferentes momentos, y el arrebatamiento pre-ira que ocurre durante la última mitad de la septuagésima semana de Daniel. (Para detalles sobre las teorías del arrebatamiento, desde la perspectiva pentecostal, vea a Stanley M. Horton, Our destiny: Biblical Teachings on the Last Things [Springfield, MO: Logion Press, 1996].)
Bicket, Z. (2008). Introducción a la doctrina pentecostal. (M. Gallardo, Ed., V. A. Soto, Trad.) (pp. 160–161). Springfield, MO: Global University.

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